Antes hacía un sofrito que requería bastante tiempo, pero hace poco descubrí un producto en Mercadona (me declaro fan absoluta de los productos Hacendado) que me facilita toda esa tarea, se está convirtiendo en la base de muchos de mis platos. Yo soy partidaria de utilizar todos aquellos productos que nos puedan simplificar la vida, siempre que sean de calidad, claro y este lo es, así que os recomiendo que lo probéis.
- 1 malla de mejillones
- 1 bote de fritada
- Pimentón picante
- Vino blanco
Se tritura la fritada con la batidora para conseguir una salsa mas fina, se vierte en un cazo y se le añade pimentón picante al gusto, un chorrito de vino blanco. Se va rehogando para que se cocine el pimentón y se concentren bien los sabores. Yo lo tengo a fuego bajo una media hora aproximadamente.
Si no tenéis cerca un Mercadona, os explico cómo hacer el refrito: Se ponen a pochar en una sartén con un poco de aceite cebolla, pimiento rojo y un diente de ajo, cuando se esté empezando a dorar, se añade el pimentón picante (yo siempre retiro la sartén para que no se queme, es muy delicado y quedaría un sabor amargo, con el calor que tiene la sartén es suficiente para cocinarlo), el tomate frito y un chorrito de vino blanco. Se deja al fuego una media hora mas para que se concentren bien los sabores.
Mientras se va cocinando la salsa, se limpian bien los mejillones y se ponen los mejillones a cocinarse al vapor, yo simplemente cubro de agua la base de la cazuela en la que los vaya a cocinar. Se tapa y se espera hasta que se vayan abriendo los mejillones.
Se colocan en una fuente y se salsea. Buen provecho!!!
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